¿Vive en el exterior, quiere una vivienda en Colombia, pero tiene dudas acerca de si es un buen momento para comprar en medio de la crisis que vive el mundo por el coronavirus? La respuesta a esta inquietud es solo una: los bienes raíces aún son una buena inversión.

No se trata de tapar el sol con un dedo, como se dice coloquialmente, pero sí de darle un parte de tranquilidad porque hay inventario y, ahora más que nunca, están las posibilidades que ofrece el mundo virtual para consolidar el proceso. 

Lo primero, obviamente, es tener claro que los ahorros con los que cuenta puede destinarlos a la inversión. Lo segundo, que si va a dar el paso podrá beneficiarse con el precio del dólar, que promedia los $4.000; es decir, el dinero, desde el exterior, va a rendir más.

Apoyo institucional

Otra ventaja es que la Dirección de Asuntos Migratorios, Consulares y Servicio al Ciudadano del Ministerio de Relaciones Exteriores, apoya a los colombianos residentes en el exterior. ¿Cómo? A través del Programa Colombia Nos Une. 

Además, si lo prefiere, está el contacto directo con las constructoras del país en sus sitios web, que, de hecho, a propósito del coronavirus, están más fortalecidas, pues se han montado a la nube de los negocios virtuales y están empezando a ver los resultados.

Sobre las entidades que ofrecen la opción de adquirir bienes raíces a los colombianos radicados en el exterior, vale destacar, además de las inmobiliarias y constructoras, al Fondo Nacional del Ahorro (FNA), que también tiene un programa que apoya la adquisición.

Por ejemplo, a los connacionales en Estados Unidos y México, la entidad les ofrece la posibilidad de comprar a través del ahorro en una Cuenta de Ahorro Voluntario Contractual. Igualmente, la banca tradicional tiene opciones, previo cumplimiento de pasos como:

- Seleccionar la vivienda.

- Nombrar apoderado en Colombia.

- Buscar la financiación.

Con estos procesos surtidos, lo que sigue es la firma de la promesa de compraventa, los pagos de gastos adicionales y la escrituración. Luego, lo que soñaba y que en medio de una situación complicada como el covid-19, será todo un privilegio: la entrega de la vivienda. 

Lo que sigue, es decir, la decisión de habitarla –si va a regresar al país– o arrendarla, obviamente es suya. Lo importante es que al margen del coronavirus, ese activo le permitirá asegurar un patrimonio y una valorización de la inversión.

Escrito Por: ,Estrenar Vivienda

#ConstruyendoSueños